DR STRANGE: ACCIÓN, DRAMA, AVENTURA PARA UN GRAN PERSONAJE MARVEL

Sorprendente lo que se logra con este personaje que en la galería Marvel aparece tan atrás, mediáticamente al menos.
Lo que prueba que Doctor Strange: Hechicero Supremo es más interesante de lo que en Hollywood habían calibrado.
Mucho contribuye a ello la espléndida interpretación de Benedict Cumberbacht, que es capaz de desplegar los matices de este personaje que mezcla arrogancia, ironía, agudeza, humor y que de pronto desciende al peor infierno que para él pueda plantearse.
El Dr Stephen Strange es un neurocirujano brillante, inteligente, riquísimo… que es lo que suele verse en la vida real. La especialidad es una de las mejores pagadas porque requiere de mucho talento en todos los sentidos posibles, incluido el físico. Largas operaciones a lo más complejo del cuerpo humano, que persiguen, y consiguen, resultados asombrosos.
Así es que nuestro querido Dr Strange es un tipo ególatra, hedonista —ama los buenos autos y su departamento inmenso y de exquisita elegancia— todos gustos que se puede dar precisamente por ser un tipo en la cúspide de esta competitiva especialidad de la medicina. Todo un Diostor, como dice mi amiga médico Marcela González.
Precisamente esa actitud de superioridad termina con él protagonizando un gravísimo accidente de auto que prácticamente le destruye lo segundo, después de su privilegiado cerebro, que más necesita para ser lo que es: sus manos.
(Primera lección: uno es mucho más que su cuerpo y su mente).
Su reacción es la esperada en un hombre como él: terquedad, la arrogancia que no cede, la negación, rechazo a cualquiera que pretenda ayudarlo solo por el temor a que lo compadezcan ¡A él, un ser superior!
El camino que debe hacer para sacudirse toda una vida construida en torno a su brillante carrera es complejo y largo. Implica dejar atrás todo aquello que que le da sentido y valor a su vida: su inmensa habilidad de cirujano,
Y lo lleva a una aislada comunidad llamada Kamar-Taj, en Nepal, en busca de recuperación.
Pero Kamar-Taj es mucho más que eso. Es un santuario.
La líder suprema es One, The Ancient One (esa magnífica actriz que es Tilda Swinton) y con ella, Mordo (Chiwetel Ejiofor, 12 años de esclavitud). La maga suprema la hemos conocido en una escena introductoria y sabemos que hay una lucha apocalíptica entre el bien y el mal que se avecina.
O sea ¡hay acción! Y un malo Kaecilius (Mads Mikkelsen, La Cacería).
“Olvida todo lo que crees saber”, es lo primero que le dicn. Esto es “callar el ego”. Allí también escuchará que “el tiempo es un insulto”.
Doctor Strange: Hechicero Supremo nos introduce en el personaje, en cómo se va convirtiendo en el Dr Strange con poderes sobrenaturales y capa “autovalente”. La acción y aventuras se suceden ágilmente, en un guión inteligente, lleno de diálogos agudos.

Los innovadores efectos especiales —un espectáculo visual— están allí al servicio de la historia y no como espectáculo pegado a la película.
Es deslumbrante.

FICHA
Doctor Strange: Hechicero Supremo.
Reparto: Benedict Cumberbatch, Chiwetel Ejiofor, Rachel McAdams (Christine Palmer), Mads Mikkelsen, Tilda Swinton, Benjamin Bratt.
Director: Scott Derrickson (guionista de El exorcismo de Emily Rose).
EE.UU., 2016.
Duración: 1 hora 55.

DATOS
Marvel Entertainment, LLC, pertenece a The Walt Disney Company.
Cuenta con más de 8.000 personajes presentados en una amplia variedad de plataformas durante los últimos 70 años.
(marvel.com. ©MARVEL).