EL VIEJO TRUCO DEL CUENTO DE HADAS

«CENICIENTA»
(«Cinderella»)
Reparto: Lily James, Cate Blanchett, Richard Madden, Helena Bonham Carter, Derek Jacobi.
Dirección: Kenneth Branagh. Guión: Chris Weitz.
EE.UU., 2015. Duración: 105 minutos.
ENTRETENIDA (SI LE GUSTAN LOS CUENTOS DE HADAS)

Un rico comerciante (Ben Chaplin), su linda y joven mujer y su bella hijita, Ella, forman la familia feliz: viven en una inmensa casona en medio de bosques, flores y praderas. Son buenos, sanos y hermosos. Un mal día, la madre enferma súbitamente y cuando está moribunda le pide a la niña que siempre sea valiente y bondadosa: «eso te dará magia».
Luego de unos años de viudez y cuando Ella (Lily James) se ha convertido en una preciosa jovencita, el padre decide contraer matrimonio con una mujer, también viuda (Cate Blanchett, lo mejor de la película), quien se instala en la casa con sus dos insoportables hijas. Pronto el padre muere y Ella queda a merced del maléfico trío para convertirse en la Cenicienta que todos conocemos.

¿Qué habrá impulsado a Kenneth Branagh, actor y director shakespereano, a hacer una película, con todas las de la ley, sobre el más clásico de los cuentos de hadas?
Por de pronto, lo organiza, le agrega algunas escenas y una cierta tensión, y le da densidad a personajes que generalmente son hechos a los brochazos. Así construye una historia más realista (dentro de lo que permite el cuento) y con un desarrollo más lógico. Todo dentro de lo convencional y esperable.
Estéticamente está siempre a medio punto del kitsch, especialmente en ciertos cuadros, donde no falta una rosa más en el decorado. Pero ¿saben qué? Casi no molesta: es coherente al fin de cuentas.
El hada madrina (Helena Bonham Carter, otro acierto) aporta las líneas de humor y el príncipe (Richard Madden), el romance.
La producción es con todo: al lado del palacio de este príncipe y el baile que organiza, Versalles es una alpargata vieja.
Todo el trabajo de vestuario ¡notable!
IDEAL PARA: niñas que aún creen en el Príncipe salvador.