En lo que se conoce como el MCU (universo cinemático Marvel), este es la primera película que protagoniza la Viuda Negra (S. Johansson) alias Natasha Romanoff: el personaje había aparecido hace 11 años.
El prólogo nos sitúa en un idílico barrio en Ohio, con niñas jugando en el jardín y dulces escenas hogareñas: papá, mamá y sus dos pequeñas hijas. Es 1995. De pronto todo se trastoca transformándose en una dramática e intensa sucesión de hechos violentos, que marca el estilo que tendrá la película.
Las más de 2 horas de metraje transcurren 21 años después, y si bien remite a los orígenes de Natasha, en realidad la historia se sitúa tras los acontecimientos de Capitán América: Civil War (2016).
Una de las virtudes del filme es que es un relato autónomo, que funciona por sí mismo: no es necesario haber visto ni acordarse de ésta ni las demás películas en que aparece Natasha.
Lo que predomina en Black Widow es la acción trepidante, los múltiples escenarios propios de una película de espías y aventuras —Cuba, Marruecos, Noruega, Budapest— y una protagonista intrépida, aunque vulnerable, que da y recibe golpes muy rudos.
(Las coreografías de luchas, con toda clase de armas y a mano limpia, son lo más alucinante que se ha visto en mucho tiempo).
Natasha está a la vez buscando y huyendo; investigando y siendo acechada y atacada. Siempre a milímetros de ser sobrepasada, corriendo por sobre techos, en avionetas, autos, motos o nadando en gélidas aguas tras caer de un puente.
Taskmaster, una suerte de Robocop, la persigue implacablemente.
Este ritmo que le imprime la directora Cate Shortland recuerda la impronta de la saga de Bourne (Jason Bourne).
Solo que se trata de un filme eminentemente femenino, que gira en torno a su protagonista y a la alianza que construye con Yelena (la gran Florence Pugh), a la que luego se suma Melina (Rachel Weisz).
Alexei Shostakov/Red Guardian (David Harbour) aporta un peculiar humor.
Los cuatro se unirán para enfrentar al siniestro Dreykov que ha creado una poderosa tecnología y una base hiper tech, donde está la Habitación Roja. Con este “programa” convierte a chicas jóvenes, que ha secuestrado siendo niñas, en máquinas de matar a su servicio, manejadas a distancia tecleando un iPad.
Todo aquello está relacionado con el pasado de Natasha.
Sí: la película también cumple aquel esquema de acción, acción, acción… pausa. Esto último para escenas de diálogos con las explicaciones respectivas y con el fin de abrir un lado humano al personaje.
Aunque incluso aquellos espacios brindan sorpresas, algunas de estas secuencias ralentan el ritmo.
Y como es tradición, hay escena post créditos (muy importante).
BLACK WIDOW
(Viuda Negra)
Dirección: Cate Shortland.
Reparto: Scarlett Johansson, Florence Pugh, David Harbor, Rachel Weisz, William Hurt.
EE.UU., 2021. Duración: 2 horas 15 minutos.
Copyright Anajosefasilva.cl 2014